"La justicia no consiste en dar a todos por igual, sino a cada uno lo que se merece".
Unos días más tarde -en concreto el pasado viernes- llegué por la mañana a mi mesa de trabajo. La jornada anterior había asistido a "Hoy es Marketing" el evento de primer nivel organizado por ESIC (mi escuela universitaria) en el que se tratan los temas de mayor actualidad en el mundo del Marketing. Tras las ponencias y cambios de impresiones del día anterior, andaba con el Marketing y la Comunicación entre ceja y ceja, así que cuando por casualidad metí la mano en el bolsillo trasero de mi pantalón y encontré de nuevo el mensaje de la galleta china, lo vi desde un punto de vista muy diferente. Rápidamente pensé en los clientes, y en la importancia de la segmentación tanto a la hora de plantear la comunicación como de mostrarles gratitud. Pensé en qué injusto puede ser que tratemos por igual a alguien que nos compra de forma habitual grandes cantidades que a quien nos compra muy de vez en cuando.
Para no enrollarme más de la cuenta, hagamos caso a la sabiduría china y apliquémosla al Marketing.
Analicemos, midamos y conozcamos a nuestros clientes, porque sin duda, ellos agradecerán tanto recibir comunicaciones adecuadas a sus necesidades, como que se reconozca su fidelidad y se les trate de forma consecuente.
Recordad:
"La justicia no consiste en dar a todos por igual, sino a cada uno lo que se merece".
Sin duda una gran frase para colgar sobre la puerta de cualquier Departamento de Marketing.